123rf Limited©nataliskripnikova. Esmalte de uñas con purpurina


Plásticos en los cosméticos

La aportación de microplásticos al medio ambiente de la industria cosmética es pequeña en relación con el conjunto de actividades humanas. Un estudio realizado por el sector cosmético europeo apunta a que su contribución es del 0,1 al 1,5% del total de la basura marina. Parece poco, pero, según datos de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) la cantidad estimada es de 3800 toneladas anuales sólo en Europa.
Todavía no existe una regulación europea sobre la inclusión de microplásticos en los cosméticos, aunque la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular introduce la prohibición de cualquier producto de plástico fabricado con plástico oxodegradable y microesferas de plástico de menos de 5 mm añadidas intencionadamente. Algunos países ya se han avanzado a la espera de la regulación definitiva y prohíben la comercialización de cosmética con microesferas de plástico como es el caso de Países Bajos, Francia y Suecia. También está regulado en otros países como Reino Unido, Estados Unidos o Canadá.
Actualmente la Comisión Europea está elaborando un proyecto de ley. De adoptarse, sería la prohibición más amplia sobre un grupo de sustancias químicas existente hasta el momento bajo el Reglamento REACH y afectaría a la industria cosmética principalmente a través de microplásticos con propiedades abrasivas para exfoliantes, brillos y fragancias encapsuladas.
Pero el problema es que en la definición de microplástico propuesta y aceptada oficialmente por la ECHA no incluye nanoplásticos ni polímeros solubles en agua, líquidos o biodegradables. Esto deja fuera de la definición una gran cantidad de sustancias plásticas que se utilizan en grandes cantidades en cosmética.
Otro problema, como han señalado en una carta abierta a la Comisión Europea un grupo de marcas de cosmética cuyos productos no contienen microplásticos, es que la nueva legislación se pueda quedar corta, con periodos de transición de 6 a 12 años en productos como lacas de uñas, barras de labios y maquillaje para eliminar el uso del plástico definitivamente. Estas empresas señalan que el uso de los microplásticos no es necesario, como sus propios productos demuestran, y que no se debe exponer a la población a estos residuos tóxicos, que ya se han encontrado en muestras de sangre humana, y también en pulmones e incluso en placentas.
El sector de la cosmética contribuye a la diseminación de plástico en el medio ambiente de dos formas: a través del plástico incorporado en los productos como ingrediente (microplásticos primarios) o a través de la degradación del plástico usado en los envases (microplásticos secundarios).


123rf Limited©nomadsoul1. Envases de plástico para cosmética


Ingredientes plásticos en la cosmética

Microperlas plásticas

Se utilizan en cremas exfoliantes, geles de baño y en pastas de dientes como sustancia abrasiva para aumentar su efecto de limpieza. El uso de microperlas plásticas se generalizó a partir de los años 90, sustituyendo a sustancias naturales que hasta entonces se usaban como la sal, frutos secos o la avena. A partir del 2015, la industria empezó a regresar de nuevo a opciones más naturales como micropartículas hechas con cera de abeja, cáscara de arroz o de maíz, tapioca, algas o compuestos minerales como sílice o arcilla y, según la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (STANPA), en 2018 ya se habían eliminado en el 97% de los productos.

Purpurina

Forma parte de la cosmética decorativa como pintalabios, laca de uñas, cremas, o aplicada directamente sobre la piel y se ha popularizado mucho estos últimos años. Aunque en sus inicios se producía a partir de láminas de aluminio, posteriormente se introdujo el uso de otros materiales de base como el poliéster o el PVC. Básicamente la purpurina de los cosméticos es plástico que llega al medio ambiente a través del agua ya sea de la ducha o de la lavadora. Hoy en día se está desarrollando purpurina biodegradable, elaborada a partir de celulosa, pero no es la que encontramos en la composición de los cosméticos porque se degradaría dentro del propio cosmético.

Plásticos líquidos

Muchas veces se olvida que algunos de los ingredientes de la cosmética convencional son polímeros plásticos líquidos, obtenidos del petróleo, igual que el resto de plásticos. Se usan en muchos tipos de cosméticos, en forma líquida o de gel y su concentración es variable pudiendo llegar hasta el 95% en algunos productos como pintalabios.
Este tipo de plásticos no se incluyen en la clasificación oficial de microplásticos por lo que escapan a cualquier tipo de restricción. Además, no estarán sometidos a la legislación que restringe el uso de microplásticos en cosmética, lo que permitirá a las empresas seguir utilizándolos con menciones en su publicidad tipo “Libre de microplásticos” o “ingredientes biodegradables” contribuyendo a aumentar la confusión entre las personas consumidoras. Sin embargo, su impacto sobre el medioambiente no está suficientemente estudiado. Tampoco existen datos fiables sobre la biodegradabilidad de este tipo de sustancias ya que su comportamiento en el medio ambiente puede ser muy distinto de lo que se obtiene en un laboratorio.
Entre este tipo de plásticos hay algunos con un claro impacto ambiental entre los que encontramos Dimethicone, Carbomer, Acrylates Copolymer, Phatalate y en general los que contienen el término Acrylate y otros donde existen más dudas sobre dicho impacto como los ingredientes que contienen PEG y la terminación “eth” (Ceteareth, Ceteth, etc). Un informe llevado a cabo en 2022 por la Fundación Plastic Soup, a partir del análisis de 7704 productos cosméticos de las principales marcas que comercializan en la UE, determinó que el 87% de los cosméticos contienen microplásticos (incluidos también los plásticos líquidos o biodegradables).

Envases de plástico en cosmética

El sector de la cosmética intenta dar respuesta a las nuevas exigencias. No está resultando fácil. La industria de los envases no ofrece actualmente alternativas a un precio razonable y las personas consumidoras no están siempre dispuestas a pagar un sobreprecio. También se están desarrollando iniciativas sobre la devolución y reutilización de envases y se están empezando a vender algunos productos cosméticos líquidos, como geles y champús, a granel.
La cosmética sólida es otra solución que está de moda. Champús, acondicionadores, jabones para el cuerpo y desodorantes son los más comunes. Su fórmula sólida evita tener que utilizar un envase de plástico. Se trata además de productos sin agua por lo que se elimina la necesidad de utilizar conservantes. La recomendación es buscar opciones certificadas porque algunos ingredientes utilizados en las versiones sólidas no son aptos para la cosmética econatural.
El problema de los plásticos en cosmética no es fácil de resolver. Por un lado, se utilizan principalmente en forma líquida como ingredientes baratos en la mayor parte de los productos y, por otro lado, queda mucho camino por recorrer hasta encontrar envases adecuados sin plástico. Una vez más, las personas consumidoras tienen la responsabilidad de elegir aquellas opciones que no los incorporan, como la cosmética econatural certificada que prohíbe el uso de plásticos líquidos, o elegir los envases más sostenibles.

AutorasNuria Alonso, Certificación BioVidaSana y Montse Escutia, Proyecto Ecoestética
Publicado en El Botiquín Natural Octubre 2023